Durante aquella época se había desatado una loca carrera en pos del record de partidas a la ciega disputadas en unas simultaneas. Alekhine, Reti, Breyer y Koltanowski peleaban por este privilegio. Sus sesiones de simultaneas se hicieron legendarias y muchas fueron las ciudades que decidieron albergar este espectáculo... baste recordar las sesiones dadas por Koltanowski en España.

            Reti había logrado el record en 1919, dejándolo en 24 partidas. Esta marca resistió durante dos años, pero otro maestro adscrito a los hipermodernos, de nombre Gyula Breyer, lo superó por una sola partida. Reti decidió intentar recuperar el record en 1925, el cual estaba en manos de Alekhine que lo había dejado en 26 partidas. Para ello se desplazó a Sao Paulo (Brasil) y decidió que se enfrentaría a 28 rivales... cifra que se vio obligado a cambiar ya que sólo unas horas antes Alekhine había dado una sesión en París contra 28 jugadores... hasta ese límite se llegó en la lucha por este record.

             Al final Reti se batió ante 29 rivales y para la homologación del record debería batir la puntuación lograda por Alekhine en París, que fue de 19'5 puntos. Reti cumplió los requisitos, logrando un total de 23'5 puntos, con 20 victorias, 7 tablas y 2 derrotas. A continuación recréense con una de las mejores partidas de la sesión, donde Reti encuentra una bella forma de rematar la faena:

             Veamos como transcurrió la sesión, lo que nos permitirá conocer la dureza de este tipo de exhibiciones. El acto dio comienzo e las 15:45, a las 19:00 se decretó un descanso para comer. reanudándose el juego una hora y media después. Antes de reanudarse la sesión Reti deleitó a los espectadores reproduciendo todas las partidas de memoria. La última partida finalizó a las 3:50 de la madrugada, tras 10 horas y 19 minutos de juego, una sesión realmente agotadora.

              En este tipo de exhibiciones los maestros siempre exigían unas ciertas normas para rebajar el esfuerzo a que estaban sometidos: