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Cadena perpetua

Carátula de la película

( Autor : Javier Cordero Fernández - © Ajedrez de ataque )

Cadena perpetua

Estados Unidos  (1994)  

Director : Frank Darabont

Principales Actores : Tim Robbins, Morgan Freeman, Bob Gunton,

James Whitmore, Gil Bellows, William Sadler, Mark Rolston, Clancy Brown

 

                Hoy vuelvo a escribir sobre otra de mis películas favoritas. Y es que 'Cadena perpetua' me tuvo anclado al sillón, hace ya algunos años, durante más de dos horas y media. En mi opinión, es la mejor película ambientada en el mundo carcelario, que retrata con gran realismo la dureza de ciertos centros penitenciarios, la soledad y la pérdida de la libertad, pero también la amistad y la búsqueda de cualquier razón para intentar volver a sentirse seres humanos.

 

Red y Andy en el patio de la prisión

Red y Andy, en el patio de Shawshank

                La trama de la película no gira en torno al ajedrez, pero si resulta importante para el protagonista, Andy Dufresne (Tim Robbins). Andy es uno de los reclusos de Shawshank, donde ha llegado tras ser injustamente condenado por el asesinato de su mujer. La vida en prisión no es sencilla, pero Andy encontrará amigos que le harán sobrellevar mejor la carga, sobre todo Red Redding (genialmente interpretado por Morgan Freeman).

                Andy es un apasionado de la geología y se refugia en esta actividad para no caer en la desesperación. Aquí es donde entra en juego el ajedrez, otra de las aficiones de Andy, ya que el preso fabrica un ajedrez tallando distintas piedras en la soledad de su celda, durante las interminables noches encerrado en prisión.

 

                Y es que la privación de libertad puede destruir la mente de cualquier ser humano, por eso Andy busca refugiarse en un juego como el ajedrez: "En la cárcel un hombre hace lo que sea por tener la cabeza ocupada". Y la elección no pudo ser mejor, no creo que exista una actividad que te aísle del mundo exterior como el ajedrez, tu mente se concentra sólo en el juego y el resto de cosas parecen desaparecer, los problemas que te agobiaban hace un rato, dejan de existir, y sólo tienes ojos para ese caballo traicionero que acosa a tu desdichada dama. Todo un tesoro para unas personas que necesitan olvidarse de su penosa situación, sin poder atravesar los muros que les mantienen encerrados. 

                El ajedrez tiene más apariciones en la película, en una de ellas Andy busca un rival para sus partidas y mientras juega una partida de damas con Red, le comenta: "El ajedrez, eso si que es un juego de reyes, ingenioso, estratégico". A lo que Red replica: "El ajedrez es un juego demasiado profundo, no es lo mío". La respuesta de Red seguro que es compartida por mucha gente, personas que no se atreven a iniciarse en el ajedrez por miedo a que esto le supere. Claro que es un juego profundo, pero no todos los que practican el ajedrez tienen que llegar a ser un fortísimo GM; juega, disfruta, busca tus límites e intenta superarte, descubrirás un juego casi infinito que te dará horas de diversión y que desarrollará muchas capacidades que tu mente tenía enterradas.

                Tenemos ante nosotros una visión distinta del ajedrez, lejos de los torneos y del profesionalismo. Un juego capaz de dar horas de diversión al que lo practica, en el lugar que sea y con sólo disponer de un tablero y unas piezas.

             La película tiene muchas más historias unidas a la trama principal, que no pienso desvelar aquí, y sugiero al que no la haya visto, que lo haga y podrá disfrutar de dos horas y media de excelente cine.

Ajedrez tallado por Andy

Ajedrez fabricado por Andy en su celda

Rejas de la celda de Andy con las piezas de ajedrez

Uno de los guardias inspecciona la celda de Andy. Imagen preciosa, con el rey 

entre rejas.

NOTA: A continuación se revelan partes importantes de la trama, si tienes pensado ver esta película no sigas leyendo.

                Esta historia, muy dura por momentos, tuvo un final feliz, Andy consiguió fugarse de Shawshank, pero no sin pasar duras penalidades. Y es que lo logró tras excavar un túnel en la pared de su celda, con un diminuto martillo de gemas, durante 25 largos años. Túnel que daba a las tuberías del alcantarillado, y por esas tuberías, rodeado de inmundicia, Andy Dufresne alcanzó la libertad más allá de los muros de Shawshank.

            Andy, en la huida, sólo se llevó lo que le podía ayudar en su plan (ropa, jabón, zapatos) y una cosa más... su ajedrez, ése fue el único objeto que quiso llevar consigo en su viaje a una nueva vida.

Javier Cordero Fernández

(6 Diciembre 2008)

 

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